Sopa de tomate estilo andaluz

Esta receta se la tengo que agradecer a dos amigas andaluzas y a la mamá de una de ellas. Gracias Jennifer por hacerme conocer la existencia de esta exquisita sopa y traslada de mi parte las gracias a Mercedes, tu mamá, por darte los detalles de como me debía quedar, gracias también a ti Carmen que me facilitaste como la hacías en tu casa. Tanto la mamá de Jennifer como Carmen echan pimiento rojo en su receta y lo dejan en trocitos al igual que la cebolla, pero yo debido a  gustos propio, pasé toda la verdura por la batidora, así que tú amig@ lector, hazla como más se adapte a las apetencias de tu casa, también coincidieron Carmen y Mercedes en usar parte del caldo  de las almejas,  pero como yo usé almejas congeladas,  lo que hice fue un ligero caldo con las vestiduras de las gambas. te dejo aquí la explicación de como lo hicieron ellas y paso ahora a explicarte con detalle, como lo hice yo. Anímate que es muy fácil y esta deliciosa

Ingredientes para el caldo:

1 zanahoria

1 diente de ajo

1/2 cebolla

1200 ml de agua

Vestiduras de gambas 

Ingredientes para la sopa:

Pan del día anterior

Caldo

1 zanhoria

1/2 cebolla

1 pimiento, el que más te guste

170 gr de gambas

6 cucharadas de aceite

1 1/2 cucharilla de sal

1 cucharada de azúcar

170 gr de pan, yo usé (candeal)

400 gr de almejas

780 gr de tomate de bote 

Preparación:

Primeramente haces el caldo.

Ahora humedeces con un poquito del caldo el pan, córtalo muy fino o como dice la abuela de mi joven amiga Jennifer, córtalo a pellizcos.

Ay las abuelas, que lindas son!

Pones el aceite en una cazuela y cuando se caliente, procedes añadir el pimiento y la cebolla, todo troceado.

Rehogas bien sin dejar de remover un par de minutos.

Seguidamente le echas un pelín de sal y tapas la cazuela bajando el fuego para sofreír.

Recuerda que sofreír es a fuego muy suave y tapamos para no perder liquido......
 

Cuando las verduras están pochadas, les añadimos el tomate, la sal y el azúcar para evitar la acidez.

Lo dejamos así con la cazuela tapada por espacio de diez minutos y a fuego más bien suave

Pasado este tiempo, le añadimos el caldo y lo dejamos a fuego moderado y destapado para que se mezclen sabores y a la vez reduzca un poco, probablemente tarde otros diez minutos.

Una vez que haya transcurrido el tiempo de reducción, le agregamos las almejas.

Recuerda quitar la cascara para que te resulte más agradable comer la sopa, aunque eso es a gustos.

Las dejaremos cinco minutos y seguidamente incorporaremos las gambas.

Cuando las almejas estén hechas ( habrán perdido por completo su color translucido) añades el pan.

Junto con el pan, echas una ramita de hierbabuena y lo dejas todo cinco minutos.

Esta sopa es una delicia y como te decía arriba, la puedes hacer más sencilla usando agua y  algo del agua de lavar la almeja, si usas frescas, limpialas bien y le echas el último agua bien colada a la sopa.

También puedes hacer esta sopa sin almejas y gambas, solo con las verduras y el pan y especialmente con la hierbabuena.

Otra puntualización de mi amiga Carmen es que le puedes echar un huevo al finalizar la cocción.

Disfruta de este sabrosisimo plato.

Gracias por llegar hasta aquí y visitar mi blog